El anuncio bomba de Juan Grabois a horas del cierre de listas
El dirigente social anunció que no competirá en las elecciones PASO del 13 de agosto y que respaldará el proyecto de país del actual ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro.
Así como lo dijo al lanzarse, ésta era la única condición para bajar su postulación. Ambos dirigentes del oficialismo recorrieron juntos el país y tienen un plan quinquenal.
Lo hizo a través de un video en sus redes sociales bajo el siguiente texto: «Lo que decimos, lo cumplimos. Sin especular. Convencido de que nuestra militancia forjada en la lucha consecuente por el pueblo humilde y la patria grande es futuro, agradecido eternamente por tanto amor a todos, declino mi candidatura. Wado presidente, Kicillof gobernador y Rosemblat jefe de Gobierno».
En el video, Grabois explica su decisión y plantea un recorrido histórico de la lucha contra el liberalismo en ocho minutos. Habla de un tejido comunitario y señala a las principales figuras de la oposición como sinónimo de decadencia respecto a su participación en el poder a comienzos de la primera década del siglo XXI.
«Decidimos unificar el plan de desarrollo integral con el plan de desarrollo federal de Wado de Pedro. Estamos convencidos que sin una planificación estratégica no hay una Argentina posible. Decidimos promover un perfil político para estas elecciones bajo un desencanto con el Poder Ejecutivo, signado por la improvisación en la gestión, por la debilidad a la hora de confrontar con los poderes fácticos y con la legitimación de la estafa del pacto entre Macri y el FMI», comienza expresando.
«Promovemos a Wado en Nación y a Axel en provincia porque son los dos candidatos más competitivos de esta generación. Además son hombres formados junto a Cristina, la principal líder del movimiento popular argentino. En ella vemos una referencia ineludible. No le juramos ser solados pero la apoyamos hasta mucho más que otros que dicen serlo. Se calentaron con el calor de las oficinas», continúa.
«La agresión democrática es contra las bases populares, contra un modelo de país en el que no quepamos todos. Nuestros candidatos no son sólo buenas personas, sino que son los mejores. Tenemos el optimismo de la voluntad pero también el de la razón», sentencia.