La advertencia del Ministerio de Salud: crece la presencia de una bacteria que puede llegar a ser mortal
Buenos Aires se ubicó entre las provincias con más casos.
La Streptococcus pyogenes, también conocida como Streptococcus del grupo A, es la causa más frecuente de faringitis aguda e infecciones cutáneas. Durante lo que va del 2023, se confirmó al sistema nacional de vigilancia de la salud un aumento de la presencia de esta bacteria en diferentes provincias de Argentina.
Son 118 los casos confirmados de infección invasiva por Streptococcus pyogenes y 16 fallecidos a causa del contagio. Entre las provincias con mayor cantidad de infectados se encuentran Buenos Aires, Santa Fe, Chubut y Tierra del Fuego.
“En relación a los casos confirmados de infección invasiva por Streptococcus pyogenes en los años anteriores (2019-2022), el mayor número de casos se había registrado en 2022 (año cerrado) con 75 casos reportados”, indicó la cartera de Salud.
Qué síntomas que produce el Streptococcus pyogenes
El Ministerio de Salud indicó como síntomas de la faringitis el dolor de garganta, fiebre, cefaleas, dolor abdominal, náuseas, vómitos, enrojecimiento de faringe y amígdalas, mal aliento y ganglios aumentados de tamaño en el cuello.
Además, el Streptococcus pyogenes puede ocasionar lesiones cutáneas como la escarlatina. Los síntomas, en este caso, son garganta enrojecida y adolorida, fiebre de 38.3 °C o superior; erupción corporal de color rojo con textura rugosa; piel de color rojo intenso en las axilas, codo e ingle; lengua “aframbuesada” con recubrimiento blancuzco; dolor de cabeza, náuseas, vómitos e inflación en los ganglios.
Para tratar estas afecciones, es importante evitar la automedicación y concurrir lo más pronto posible con un médico. El tratamiento se da con antibióticos y el procedimiento, una vez empezado, no debe ser interrumpido o abandonado.
Cómo se transmite el Streptococcus pyogenes
El período de incubación para la enfermedad varía de acuerdo a la presentación clínica, entre 1 a 3 días. El tratamiento de las personas infectadas con antibióticos durante por lo menos 24 horas elimina por lo general su capacidad de propagación.
La faringitis se diagnostica mediante cultivos bacterianos y se trata con antibióticos. La higiene de las manos y la higiene personal pueden ayudar a controlar la transmisión.
Fuente: LA GACETA
