Cáscaras de mandarina y vinagre: el potente limpiador casero que desinfecta y ahuyenta insectos

El aprovechamiento de residuos orgánicos se vuelve tendencia y, entre ellos, las cáscaras de mandarina encabezan la lista por su versatilidad. Al ser combinadas con vinagre blanco, dan como resultado un producto casero con propiedades antibacterianas, desodorizantes y repelentes, ideal para la limpieza del hogar.
El vinagre es ampliamente valorado por su acción desinfectante y desengrasante, aunque su fuerte aroma suele resultar un inconveniente. Sin embargo, al mezclarlo con cáscaras de mandarina, ese olor se suaviza y se incorporan aceites esenciales cítricos, que no solo mejoran la fragancia sino que también potencian su capacidad desinfectante.
Este limpiador es ideal para cocinas, baños y todo tipo de superficies. También se destaca como desengrasante para hornallas, campanas y mesadas, y ayuda a neutralizar malos olores en espacios cerrados o cestos de basura. Además, su aroma cítrico actúa como un repelente natural de insectos, especialmente hormigas y moscas.
Paso a paso: cómo preparar este limpiador natural
– Reunir cáscaras limpias de dos a tres mandarinas.
– Colocarlas en un frasco de vidrio y cubrirlas completamente con vinagre blanco
.- Tapar el frasco y dejarlo reposar por al menos 10 días en un lugar oscuro y fresco.
– Una vez pasado ese tiempo, colar el líquido y colocarlo en un recipiente con pulverizador.
– Aplicar directamente sobre las superficies que se deseen limpiar o desinfectar: mesadas, electrodomésticos, muebles de cocina, entre otros.
El uso de ingredientes naturales para la limpieza refleja un interés creciente por soluciones caseras, más económicas y ecológicas, frente a los productos industriales. Además de la mandarina, otros cítricos como el limón y la naranja también se utilizan por sus propiedades aromáticas y desinfectantes.