El triunfo de Milei, los votos perdidos y otras perlitas del escrutinio definitivo en Tucumán

La Libertad Avanza superó por poco más de 30.000 votos a Unión por la Patria, la segunda fuerza más votada, en la categoría presidente.

El escrutinio definitivo en Tucumán confirmó que el libertario Javier Milei fue el precandidato presidencial más votado en la provincia, derrotando por poco más de 30.000 votos al peronismo. Pero, además, el recuento de sufragios por parte de la Justicia Electoral Nacional exhibió otros datos llamativos de las PASO del 13 de agosto.

Fueron 989.135 los electores que acudieron a las urnas, lo que representó un 74,87% de participación. Ese porcentaje estuvo por encima de la media nacional pero, aún así, fue la elección primaria con menos participación de la historia en la provincia, desplazando a las PASO de 2019, que habían contado con un 77% de participación.

De ese total de votos, La Libertad Avanza, el espacio que encabeza Milei, cosechó 350.378, lo que representa casi un 35,5% del total. El candidato libertario, además, se impuso en seis de los 17 departamentos provinciales. Quizás no parece un número importante, pero el dato significativo es que se impuso en las tres jurisdicciones más pobladas: Capital, Cruz Alta y Tafí Viejo, que sumadas conjugan el 57,6% del total de los votantes. Chicligasta (quinto departamento más poblado), Lules y Famaillá fueron los otros lugares donde ganó Milei.

En segundo lugar quedó Unión por la Patria, casi 30.000 votos por detrás del espacio libertario a nivel provincial. En total, el peronismo fue apoyado por 319.099 electores (32,2%), es decir, más de 293.000 votos menos que lo que logró en las elecciones provinciales.

De los votantes peronistas, un 89,5% (285.832 electores) se inclinaron por Sergio Massa, mientras que sólo un 10,5%  (33.627) apoyó a Juan Grabois. El oficialismo se impuso en 10 departamentos: Monteros, Río Chico, Juan Bautista Alberdi, La Cocha, Graneros, Simoca, Leales, Burruyacú, Trancas y Tafí del Valle. Sin embargo, porcentualmente, esas jurisdicciones sólo suman el 32,3% del total del padrón, por eso no le alcanzó para ocupar el primer lugar.

Juntos por el Cambio, segundo en las elecciones a nivel nacional, fue el más perjudicado con el batacazo de La Libertad Avanza. Pese a ser la segunda fuerza más votada en las elecciones provinciales, donde sumó poco más de 370.000 votos, en las PASO vio una importante caída en su performance: con 210.794 votos (más de 160.000 menos que en los comicios locales), terminó tercero, con un 21,3% del total.

De los 17 departamentos, el único que se pintó de amarillo fue Yerba Buena. Además, la interna, al igual que a nivel nacional, quedó en manos de Patricia Bullrich, aunque de manera muy ajustada: la ex ministra de Seguridad sumó 107.001 votos (50,7% de los sufragios de JxC), contra los 103.793 (49,2%) que obtuvo Horacio Rodríguez Larreta.

El Frente de Izquierda, la otra agrupación que a nivel nacional superó las PASO, se ubicó en el cuarto lugar, con un 1,59% de los votos (15.978). La interna se definió, al igual que en los resultados generales del país, a favor de Myriam Bregman, que sumó 10.004 votos, contra 5.974 de Gabriel Solano.

Hacemos por Nuestro País, partido cuyo candidato es Juan Schiaretti, y que a nivel nacional se ubicó como la cuarta fuerza más votada, sumó sólo 11.120 votos en Tucumán (1,12%), donde no tuvo candidatos a diputados. Culminó en el sexto lugar, ya que Jesús Escobar, el candidato presidencial de Libres del Sur, cosechó 15.612 voluntades (1,57%). De todas formas, Escobar no competirá en las generales de octubre, ya que no alcanzó el piso necesario en el país.

En diputados

En la categoría de diputados nacionales, donde Tucumán renueva cinco bancas este año, los números cambiaron. Allí, sí fue Unión por la Patria, con la lista única encabezada por Pablo Yedlin, el frente más votado. La boleta encabezada por el actual senador sumó 306.270 votos (30,9%), contra los 261.028 (26,3%) que logró Ricardo Bussi, quien encabezó la lista de Fuerza Republicana, y acompañó la candidatura de Milei.

Juntos por el Cambio también terminó tercero en esta categoría, con 218.863 votos (22,1%). Aquí, la interna se definió con un poco más de claridad: la lista encabezada por Mariano Campero sumó el apoyo de 120.541 electores (55% de los votos de JxC), contra los 98.142 (44,8%) que sumó la boleta que tuvo a Germán Alfaro como primer precandidato.

Diferente a lo que sucedió en la categoría presidente, aquí fue Libres del Sur, con Federico Masso a la cabeza, quien se ubicó en el cuarto lugar, con 18.962 votos (1,91%). El Frente de Izquierda, por su parte, sumó 17.674 (1,7%); la interna la ganó la lista encabezada por Alejandra Arreguez, que sumó 11.136 votos (63%), contra los 6538 (37%) de la boleta que tuvo a Martín Correa encabezando.

El único frente local que no alcanzó el piso necesario para participar en las generales de octubre fue Política Obrera, que tuvo a Raquel Grassino como primera precandidata a diputada. El partido izquierdista sumó 5093 votos, lo que representó un 0,51% del padrón.

El voto en blanco

La diferencia en los resultados en las categorías a presidente y a diputado se pueden atribuir no tanto al corte de boleta, que existió, sino principalmente a la diferencia de votos en blanco.

En la categoría a presidente, se registraron 37.836 votos en blanco, lo que representó apenas un 3,82%. Pese a ser un porcentaje menor que en otros puntos del país, igual le permitiría ubicarse, si fuera una fuerza política, como la cuarta fuerza más votada. En diputados, fueron muchos más los tucumanos que eligieron no votar a ninguno de los candidatos, y dejar el sobre en blanco: 150.527, lo que significó un 15,22%.

Esa diferencia de votos en blanco influyó en los resultados finales de la categoría diputados. Por eso, por ejemplo, Yedlin logró imponerse, pese a sumar cerca de 13.000 votos menos que los que cosechó Unión por la Patria en la categoría presidente. Esto se debe a que Ricardo Bussi se vio mucho más afectado: más de 89.000 personas que votaron a Milei no acompañaron al legislador provincial en su candidatura a diputado. De hecho, Yedlin se impuso en 13 de los 17 departamentos, y Bussi sólo en 3.

Así como los dos frentes más votados tuvieron más apoyo en sus precandidatos presidenciales que en los de la lista de diputados, en otros casos, la situación fue al revés. Tanto Juntos por el Cambio como el Frente de Izquierda tuvieron poco más de 10.000 votos más en la categoría diputados que las que cosecharon sus precandidatos a la presidencia, mientras que en Libres del Sur, la diferencia fue de poco más de 2000 votos.

¿Se perdieron votos?

Una situación particular se dio con algunos frentes: el escrutinio definitivo arrojó un número de votos menor al que tenían en el recuento provisorio, que se detuvo en el 98,52% de las mesas. Es decir, no sólo no sumaron votos en las mesas que faltaban escrutar, según los datos oficiales, sino que algunos de los que habían cosechado terminaron yendo hacia otro lado.

En el escrutinio provisorio, Juan Grabois, el precandidato que perdió en la interna de Unión por la Patria, sumaba 33.319 votos; en el definitivo, sin embargo, sumó 33.267, es decir, 52 votos menos. Un número de voluntades un poco más alto (114) perdió Myriam Bregman, que pasó de tener 10.118 en el provisorio, a 10.004 en el definitivo.

Juan Schiaretti, que tenía 11.302 votos en el escrutinio provisorio, figura en el definitivo con 11.120, lo que implica una pérdida de 182 votos. También sufrieron esta “pérdida” algunos de los frentes más chicos, que no superaron el corte de las PASO: Principios y Valores, que presentó cinco precandidatos, había logrado el apoyo de 2099 tucumanos según el recuento provisorio, aunque el definitivo evidenció un total de 1995 votos; mientras que el frente Liber.Ar, que tuvo tres precandidatos, fue el más afectado: de 514 votos, pasó a tener apenas 124, es decir, perdió 390 votos. (Producción periodística: Joel Katz)

Fuente: LA GACETA