La mujer que le robó el celular al gobernador ¿eligió mal a su víctima o lo hizo por encargo?
Una mujer de 34 años fue detenida y procesada con prisión preventiva por el hurto del celular del gobernador Osvaldo Jaldo, durante un acto público en la localidad de La Cocha. El hecho, que inicialmente fue calificado como un robo simple, abrió una investigación que ahora apunta a posibles maniobras de inteligencia o espionaje con implicancias institucionales, según lo expuesto por el Ministerio Público Fiscal.
La acusada, Liliana Carrizo, fue identificada tras revisar imágenes del evento en las que se la ve extrayendo el teléfono del mandatario mientras se tomaban una fotografía. La auxiliar fiscal Emilse Guevara informó que fue aprehendida en flagrancia y que aún no se sabe qué hizo con el aparato durante los 50 minutos que lo tuvo en su poder. La justicia autorizó, además, el análisis de tres pendrives, un celular y una computadora del programa “Conectar Igualdad” incautados en su domicilio.
La gravedad del caso radica en que el teléfono podría contener datos sensibles relacionados con asuntos de Estado. Por esta razón, la fiscalía solicitó y obtuvo una prisión preventiva por 30 días, que la imputada deberá cumplir en la alcaldía de Delfín Gallo. La defensa oficial, a cargo de Pablo Cannata, no objetó la medida aunque pidió que se contemple el arresto domiciliario, lo cual fue rechazado por el juez Cristian Velázquez.
La querellante Paula Morales, designada por Jaldo, advirtió sobre la posibilidad de que una organización criminal esté detrás del robo, con el objetivo de extraer información estratégica. “No está claro cuál fue el verdadero fin del robo”, sostuvo, y pidió una calificación más severa. Aunque el juez optó por mantener la carátula provisional, no descartó su modificación a medida que avance la causa.
Carrizo prefirió no declarar ante el tribunal. Mientras tanto, se desarrollan nuevas pericias y entrevistas, además del análisis de las cámaras de seguridad para establecer si la mujer tuvo contacto con terceros tras el hurto.
El gobernador Jaldo, por su parte, expresó su sorpresa y preocupación por el incidente. Aseguró que se trata de un caso aislado y descartó reforzar su esquema de seguridad, aunque confió en que la Justicia esclarecerá el hecho y determinará si existen responsabilidades más amplias.
