La Provincia aportará fondos propios para evitar que las obras se paralicen
El gobernador, Osvaldo Jaldo , precisó que la declaración de emergencia en obra pública permitirá a la Provincia contribuir con fondos propios para evitar la parálisis de los proyectos.
“La ley nos permitirá negociar contratos para que algunas obras no queden sin ejecutar en el caso de que la situación económica de la Provincia lo permita, para retomar construcciones con recursos provinciales y después recuperarlo cuando la Nación envíe la financiación correspondiente”, remarcó.
El mandatario sostuvo que la norma garantizará avances en obras, cumplimiento contractual y reactivación del empleo. Recordó que el 90% de la obra pública en Tucumán es financiada por el Estado nacional y el 10% restante por organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o la Corporación Andina de Fomentos (CAF).
“El Gobierno nacional no definió con claridad qué rumbo la dará a la obra pública en los 23 distritos. Estamos esperando que se defina la ley “Bases” (en su tratamiento parlamentario) para que luego Nación empiece a anunciar medidas concretas”, razonó el titular del PE.
Y prosiguió: “Los recursos y certificados no están llegando, las empresas no están cobrando, las obras disminuyeron sus avances físicos, los trabajadores de la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina están sin trabajo, por lo que decidimos participar (de forma conjunta) con la Legislatura declarando la emergencia de obra pública”, enfatizó.
Según destacó, entre los puntos centrales de la ley que tratará mañana la Cámara aparecen un nuevo marco legal a las finalizaciones parciales de obra entre el Estado Provincial y las empresas de la construcción sin que haya sanciones por incumplimentos; la recuperación de puestos de trabajo de la construcción; la devolución por parte de la Nación del financiamiento (que adelantará la provincia) cuando decida girar los fondos.
La prioridad del Gobierno provincial son las obras de mejoramientos y refacciones en escuelas públicas, agua y cloacas, y seguridad. En este último punto se destacan la cárcel de Benjamín Paz, la alcaidía de Las Talitas y de Delfín Gallo.
