Los acusados por la mula arrepentida tenían balas, un equipo de radio y un celular que sería el de la denunciante
Un teléfono móvil, más de medio centenar de proyectiles 9 mm y un equipo de radio, fueron los elementos que decomisó la Policía de Tucumán durante los allanamientos que se realizaron por un caso que promete ser uno de los más polémicos del año, conocido como el de la “mula”, y por dejar a la vista los aspectos más oscuros y retorcidos del narcotráfico que se expande en Tucumán.
María Magdalena Zelarayán dijo que la contrataron para traer mercadería desde Orán, en Salta, a cambio de U$S 400. Agregó que al llegar a Tucumán comenzó a ser perseguida por policías y que por ese motivo dejó abandonado el vehículo en el que viajó en el sur de la capital, en el que estaba oculta la droga, pero que ella no sabía de su existencia.
Horas después, siempre según lo que relató en la Justicia, aseguró que un tal “Miguel”, Carlos Nadir Díaz y Yanina Coronel se presentaron en la casa de su madre para buscarla y como no la encontraron, le robaron un televisor, un equipo de música y un ventilador de pie. Además, le dijeron que la matarían a ella y a toda su familia.
Zelarayán hizo la denuncia el sábado a la tarde en la seccional 13ª y dejó en claro que hacía responsables a esas tres personas si es que le llegaba a pasar algo. El lunes, pasado el mediodía, fue secuestrada de su casa. En su exposición policial volvió a acusar a las mismas personas.
Díaz y Coronel por su parte, rechazaron cualquier vinculación con el caso. La mujer reconoció que ella había ido a buscar a la denunciante, pero no para secuestrarla, sino para reclamarle que tenía un amorío con su pareja.
Por este caso, el Ministerio Público Fiscal abrió dos expedientes. Uno por el robo y está siendo investigado por Pedro Gallo y el otro, por secuestro. Este último pasó a manos de Mariana Rivadeneira que consideró que debía ser investigado por la Justicia Federal, planteo que fue aceptado por el juez Bernardo L’Erario Babot. El caso ahora deberá ser investigado por el fiscal federal Agustín Chit.
En el marco de la causa de robo, el viernes por la tarde, personal de la seccional 13ª, con autorización del juez Facundo Maggio, realizó allanamientos en dos domicilios del barrio Manantial Sur, propiedad de los señalados.
En uno de ellos, el personal policial al mando del comisario Felipe Ibarra, secuestró 50 balas nueve milímetros, un equipo de radio y documentación de un vehículo Chevrolet Cruze que, según la denunciante, había sido utilizado por los acusados en los dos hechos que relató.
Los policías hallaron también un celular que creen, sería el que la mujer que dijo haber transportado droga sin saberlo, afirmó que le habían quitado cuando fue víctima de un extraño secuestro.
Fuente: CONTEXTO
