Los reiterados hechos delictivos que arrasan con las escuelas de Concepción
El despojo que sufren los establecimientos escolares del sur, convertidas en el objetivo preferido de los vándalos, no hizo otra cosa que agravarse en lo que va del año.
El martes por la noche arrasaron con la débil tela metálica que protegía el perímetro de la escuela Amalia Prebisch de Piossek y se llevaron la bomba de agua que abastecía al establecimiento.
El edificio, ubicado en el cruce de las calles Haimes y Chacabuco, en la Perla del Sur, quedó inhabitable, sin suministro de agua y con la imposibilidad de usar los baños, por lo que las autoridades decidieron discontinuar las clases presenciales y pasar a la alternativa virtual, que se mantendrá hasta que se logre recuperar el servicio sanitario.
Poco tiempo antes los malvivientes accedieron a la escuela Florencio Balcarce y se robaron aparatos de audio y otros elementos didácticos, episodio que se repitió también en la escuela especial Inmaculada Concepción, a pocos metros de la anterior, por la calle Haimes.
El intendente sureño Alejandro Molinuevo reaccionó afirmando que requerirá al ministro de Seguridad Eugenio Agüero Gamboa que se tomen medidas de prevención para evitar que casos similares se repitan.
El burgomaestre enfatizó en que los ataques a las escuelas terminan afectando el erario municipal, ya que deben destinar recursos comunales y afectar personal a la reparación de los daños que produce el vandalismo.
En la ciudad de Concepción funcionan poco más de veinte establecimientos educativos y más del 80 por ciento de ellos ya fueron atacados al menos una vez por los ladrones.
Juan Ramón Palina, director de la última escuela vandalizada, reveló que el despojo que dejó al establecimiento sin agua fue descubierto por el personal de maestranza el martes, cuando llegaron para retomar la actividad.
El destrozo de la cerca perimetral y la falta de agua llevó a las autoridades zonales del área educativa a limitar las actividades de la semana corta al acto en memoria de Manuel Belgrano, tras lo cual los alumnos y el personal fueron licenciados.
El directivo confirmó que, hasta tanto la bomba sea remplazada y se restituya el servicio de agua, las clases se dictarán de manera virtual, al tiempo que aclaró que la Prtebisch de Piossek, como la mayoría de las escuelas de la zona, carecen de un sereno.
Palina agregó algunos detalles a su relato, revelando que los ladrones cortaron la fibra óptica de la cámara de seguridad de la escuela y que los llamados a la Policía cada vez que hay vándalos rondando, muchas veces no tienen respuesta.
Al final, él y los vecinos rememoraeron la época en la que el último guardia nocturno que tuvo el establecimiento, se instalaba dentro con dos perros, lo que alcanzaba para garantizar que nadie atente contra el derecho a la educación de los chicos de Concepción.