Un operativo de rutina en Alberdi derivó en el secuestro de cocaína y generó un fuerte revuelo político

Un operativo antidrogas realizado esta semana en Juan Bautista Alberdi reavivó las denuncias sobre presuntos vínculos entre el narcotráfico y el poder político local, mientras la Justicia Federal avanza con la investigación por el secuestro de un kilo de cocaína.
El procedimiento, a cargo de personal de la Didrop Sur, tuvo lugar el martes por la tarde en un camino que conduce a la localidad de Santa Clara. Durante un patrullaje, los efectivos, bajo el mando de los comisarios Rufino Medina y Jorge Nacusse, observaron a dos motociclistas en actitud sospechosa. Al intentar detenerlos, se inició una persecución que finalizó a pocas cuadras.
Tras reducir a los sospechosos, identificados como Rodrigo “Patón” Campo (34) y Leandro Exequiel González (33), los uniformados encontraron un pan de cocaína que pesaba un kilo. Ambos quedaron aprehendidos mientras se investiga cuál era el destino de la droga, que habrían adquirido poco antes del operativo.
El caso tuvo rápidas repercusiones políticas. El legislador opositor José Cano manifestó su preocupación y sostuvo que cada vez hay más señales que vinculan al poder político local con causas narcos. Exigió que la Justicia “vaya hasta el fondo” de la investigación y que el municipio de Alberdi asuma un rol activo para erradicar los llamados «quioscos de droga».
Cano también recordó que, antes de la jubilación del fiscal Carlos Brito, presentó una denuncia con videos que involucraban a miembros de ATE señalando a los ahora detenidos como vendedores de estupefacientes.
Desde la vereda opuesta, funcionarios del municipio negaron cualquier tipo de vínculo con los arrestados. La detención de “Patón” Campo desató una ola de rumores, entre ellos, que sería familiar directo del intendente Luis “Pato” Campos o que trabajaba bajo las órdenes del secretario de Hacienda, José Roldán. Sin embargo, el abogado José María Molina, representante legal de Roldán, desmintió categóricamente ambas versiones.
No obstante, lo que sí se confirmó es que “Patón” Campo mantiene lazos personales con Carlos “Kokoz” Rodríguez, empleado municipal y ex colaborador de Roldán en su imprenta particular. Rodríguez es uno de los tucumanos detenidos por el asesinato de dos ciudadanos bolivianos en Orán, Salta, en lo que la Justicia investiga como un posible crimen narco.
Según la causa que se tramita en Salta, Rodríguez y Elvio Díaz viajaron el 10 de mayo de 2024 para encontrarse con Wilson Abdala Zutara y Ariel Ledezma Salinas, quienes fueron hallados sin vida a la vera de la ruta 34. Aunque los acusados negaron ser los autores materiales, admitieron haber mantenido contacto con las víctimas por supuestos negocios vinculados al narcotráfico.
Rodríguez afirmó que solo acompañaba a Díaz en busca de fondos para el club Deportivo Marapa, mientras que el rugbista explicó que viajaba a ofrecer una avioneta a uno de los bolivianos, cuya esposa, cabe señalar, cumple prisión domiciliaria por una causa de drogas.
El legislador Cano pidió la intervención judicial urgente en Alberdi y apuntó directamente contra José Roldán, asegurando que es quien maneja todo en la ciudad. Según sus declaraciones, Rodríguez habría cometido el doble crimen en horario laboral y, a pesar de estar detenido, solo fue suspendido de su cargo y seguiría cobrando su salario del municipio.
Cano valoró los esfuerzos del gobernador Osvaldo Jaldo y de las áreas de Seguridad para combatir el narcotráfico, pero advirtió que Alberdi se convirtió en un punto débil en esa lucha.
En medio de la tensión, vecinos de la ciudad expresaron su hartazgo y pidieron acciones concretas para erradicar el narcomenudeo. “Estos son los que destruyen la vida de nuestros jóvenes, lo vienen haciendo hace tiempo y claramente tienen respaldo”, denunció María Laura Juárez, madre de un joven en recuperación por adicciones.
Mientras tanto, la investigación federal sigue su curso, y los hechos recientes no hacen más que profundizar la sospecha de una red que mezcla política, narcotráfico y omisiones graves en Alberdi.