La suba del petróleo tras el conflicto en Medio Oriente complica a las petroleras tras la baja de precios en Argentina
Lo que inicialmente fue una buena noticia para los consumidores argentinos, con la baja de los precios de los combustibles anunciada por YPF y otras compañías, se ha convertido en un desafío para las petroleras debido al reciente aumento del 9% en la cotización internacional del barril de petróleo Brent. Desde el martes pasado, cuando se anunció la reducción de precios, el Brent pasó de US$ 71 a US$ 78.
El conflicto en Medio Oriente, que estalló el mismo día de la rebaja de precios con los ataques de Irán sobre Israel, ha generado una nueva presión al alza sobre el petróleo, afectando las expectativas que señalaban una tendencia a la baja por la desaceleración económica global y el exceso de oferta. Las tensiones en la región podrían afectar las exportaciones de petróleo desde el Golfo, especialmente a través del estrecho de Ormuz, lo que aumenta la incertidumbre sobre los precios futuros.
Las petroleras en Argentina se encuentran ahora enfrentando un doble desafío. No solo deben absorber el aumento en los precios internacionales del crudo, sino también la suba del 1% en el impuesto a los combustibles y la depreciación mensual del 2% del peso argentino.
En la Ciudad de Buenos Aires (CABA), los precios de los combustibles de YPF actualmente son: $1048 por litro de nafta súper, $1296 la premium, $1062 para gasoil súper y $1307 para el gasoil premium. Aunque estas cifras representan un aumento del 255% en el último año, superando la inflación interanual del 209%, el reciente incremento del Brent podría complicar la estabilidad de los precios en el corto plazo.
El conflicto geopolítico en Medio Oriente pone en tensión los balances de las petroleras y plantea la posibilidad de futuros ajustes en los precios, a medida que se desarrolla la situación internacional.